El fin de semana del 14 y 15 de abril, varios de nuestro grupo fuimos a Huesca al II Congreso de Salud y Conciencia que se celebra con periodicidad bianual. El cartel que nos esperaba a la entrada del Palacio de Congresos llevaba el título “Viniste a ser feliz. No te distraigas”. Está bien llegar a los sitios y saber para qué has ido. Nos ofrecieron la posibilidad de hacer una visita guiada por la ciudad, aunque un cambio de última hora dejó fuera a mucha gente.
Todo empezó la mañana del sábado. La primera ponencia estaba a cargo del Lama Drubyu Tempa, que habló sobre la paz mental, la compasión y el amor. Su sonrisa y su risa contagiaron a toda la sala una alegría y una paz que desbordaban su persona. Y dejó esa huella en nuestro interior: su risa, reflejo de su felicidad. Habló de la necesidad de vivir desde dentro, desde lo más hondo… que la paz no se busca fuera porque está en lo profundo… y que transmitimos lo que llevamos. Ver conferencia
Marta Salvat, vino a hablarnos del Perdón, de la necesidad de empezar por perdonarnos a nosotros mismos. Una pizarra sirvió como soporte de una imagen que nos ayudó mucho: como si fuera una ola donde situar las cosas que nos ocurren, podemos tomar conciencia de desde dónde perdonamos, amamos, miramos…
Una línea media representaba la zona de equilibrio, donde está la paz, donde nos movemos en presente, donde las cosas no están enquistadas. La zona de la consciencia, del ser, de la fuente, de Dios… donde cambia nuestra mirada… pero es un lugar temporal. Somos como surferos, que montamos la ola, arriba o abajo, pasado o futuro. Nos recordó que el perdón tiene mucho de rendición, de darnos permiso, de prestar atención, de empatía… pero no tiene ningún espacio para la culpa. Ver Conferencia (Audio defectuoso)
Después de comer tranquilamente (y muy bien) en un bar cercano, la tarde empezó con la charla de Enrique Martínez Lozano. Centrado en el tema del congreso, tituló su ponencia “Crisis y felicidad, la dificultad como camino”. Con la motivación de ser feliz como horizonte, habló de cómo es posible vivir las crisis y las dificultades de otra manera, o mejor dicho, desde otro lugar (quizás ese lugar de equilibrio donde somos paz). Es necesario ser conscientes, darnos cuenta de lo que vive en nuestro interior, porque en el fondo somos felicidad. Sólo tenemos que recuperar su sentido.
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La segunda ponencia de la tarde le correspondió a Sesha, que vino a hablarnos de la meditación y de la no-dualidad como experiencias, y no tanto como conceptos. Explicó que nos movemos a través de hábitos más o menos conscientes, en mayor o menor nivel. Dijo que tan solo la compresión y el amor son libres, no son hábitos, y que ambas nos llevan al conocimiento, a esa sabiduría universal que nos sostiene.
Para terminar su charla nos invitó a jugar, a cerrar los ojos y engañar a nuestra mente y dejarnos conducir a la vacuidad. Y nos dejó allí, por apenas uno o dos minutos, para que saboreáramos o nos dejáramos sorprender. Así nos llevó de la mano a una experiencia inesperada, y lo que ocurrió en el interior de cada cual, quedó allí… pero no nos dejó indiferentes. Ver conferencia
Terminamos el día con una excursión en autobús hasta el Planetario, para contemplar una proyección preparada con un poema e imágenes. Evocaban un viaje al interior, a lo profundo, en paralelo a la contemplación, a la luz de la luna, de un cielo que quiso despejarse después de tantos días nublado. Previamente nos sirvieron un aperitivo y algo de cena vegetariana.
Y ya de vuelta, cada uno a su hotel. Que el día había resultado largo y denso.
“Del intento a la presencia”. El domingo comenzó a las 10 con Sergi Torres. Nos habló de todos los intentos que hacemos para ser, para llenar nuestra vida. Intentos para alcanzar lo que creemos que necesitamos. También de cómo todo ello es inútil cuando nos olvidamos que ya somos, que ya tenemos todo al alcance si vivimos en el presente. Si prestamos atención al momento presente nos topamos con lo que somos, y podemos soltar los lastres del pasado y del futuro. Ver conferencia
Y Fidel Delgado, con su sentido del humor, con palabras que provocan nuestra risa, nos conectó una vez más con el presente. Durante su conferencia cada cual estuvo en ese instante, para no perder las palabras que sin dejar de cuestionarnos nos hicieron disfrutar de lo profundo y lo gratuito de quien comparte su verdad.
El título de la conferencia refleja su contenido: “Atención agradecida a los cuidados incorporedados, te acompaño en el senticierto”. Bueno, casi. Ver conferencia
Y algo debimos aprender, porque en la comida (repetimos sitio, claro) y en el viaje de vuelta, disfrutamos compartiendo lo que empezamos a intuir que somos. Y muy felices.
