La espiritualidad y la transformación personal están íntimamente ligadas, ya que el viaje espiritual a menudo implica un proceso de profundo cambio interno. La espiritualidad, en su esencia, se refiere a la búsqueda de un sentido más profundo en la vida, la conexión con lo trascendental y la comprensión de nuestro lugar en el universo. Esta búsqueda puede llevar a una transformación profunda de lo que creemos ser.