«Esbozar una breve teoría del cinismo vulgar equivale
a proponer un resumen de la historia de la humanidad.
La altanería, la hipocresía y el engaño son los motores de
lo real. Como tales, dan volumen y forma al mundo. Tratar
de encontrar algunas figuras emblemáticas implicaría
casi inmediatamente intimar a todas o casi todas las funciones
sociales a presentarse en el singular tribunal. Veamos,
en cambio, cuáles son las prácticas que caracterizan
el cinismo vulgar.»